

No escribo este post con intención de describir lo que es Londres, los mejores sitios para ir ni aconsejaros lo que no os podéis perder o los lugares más de moda que he descubierto, no. Seguro que muchos ya habréis estado.
Con la de km que llevo en mi cuerpo!! He estado hasta en la antípodas! En Tahiti (precioso)! Pues no conocía Londres!
A los que como yo todavía no lo conocéis, os lo recomiendo.
Y no voy a intentar ser un genial libro de viaje/guía porque realmente fui para reencontrarme con mi hija 7 semanas después + 1 día de no verla . Es decir, 50 días sin mi “niña”…
Miguel y yo teníamos ganas de verla y pasar su cumpleaños con ella.
Pendientes teníamos muchas cosas que contarnos (más ella que yo, os imagináis. Tantas cosas pasan cuando vives nuevas experiencias!) Y aunque ya es una joven mujer y madura..teníamos temas pendientes. Hablar de esas cosas que a las madres (y padres) nos preocupan tanto y que miramos, ideamos e inventamos la mejor manera de hablar con nuestros hijos, de dialogar, de apoyarles, arroparles sin que huyan de tus discursos…¿Alguien me entiende? O mejor dicho…¿me explico?
Tenía ganas de abrazarla. Era la primera vez que se iba a vivir su aventura tanto tiempo fuera de casa . ¡Y tan lejos ! (las madres tenemos un sistema de medida diferente porque si tus hijos no están cerca… están muuuuuuy lejos! Y para mí Londres estos dos meses ha estado… lejísimos!!!)
Y eso lo digo yo. La primera que la ha animado, alentado y casi convencido para que se fuera.
Yo lo hice a los 21. La vida es una gran escuela.
Así que solo os quiero dejar con estas fotos. Compartirlas con vosotros.
Londres, mis hijos y yo. Plena, divertida, madre total, orgullosa y feliz.
El único “capricho” que me permití durante mi estancia en Londres fue… de Victoria’s Secret.
Pequeñito, como veis la bolsita tan mona..
Pero menos es nada…
Lluvia de besos!